Si sueles hacer cumbres de más de 4000 metros de altura, lo más seguro es que te hayas encontrado o te encuentres en algún momento con este ejército de hielo que se encarga de cuidar las altas cumbres de la Cordillera de los Andes, tanto en Argentina como en Chile.
Para Erick Vásquez, instructor de montaña de la Rama de Montaña de la Universidad de Chile (Ramuch), el principal obstáculo que encontramos al pasar por una zona de penitentes es la lentitud de la progresión.
Como vimos antes, estas columnas cónicas pueden llegar a medir varios metros de altura, por lo que no es fácil llegar y atravesarlos. Especialmente cuando se ubican muy cerca entre ellos, lo que te obliga a decidir si atravesarlos o esquivarlos.
Dificultades que plantea un campo de penitentes para los andinistas:
- Restricción de movilidad.
- Pérdida de visibilidad.
- Heridas y accidentes por debilitamiento de la estructura de hielo.
- Grietas no visibles bajo el hielo.